Escrito está en mi alma vuestro gesto, y cuanto yo escribir de vos deseo; vos sola lo escribisteis, yo lo leo tan solo, que aun de vos me guardo en esto. En esto estoy y estaré siempre puesto; que aunque no cabe en mí cuanto en vos veo, de tanto bien lo que no entiendo creo, tomando ya la fe por presupuesto. Yo no nací sino para quereros; mi alma os ha cortado a su medida; por hábito del alma mismo os quiero. Cuanto tengo confieso yo deberos; por vos nací, por vos tengo la vida, por vos he de morir, y por vos muero. Garcilaso de la Vega.
Cuando el gran capitán
Flinders llegó al pico más alto de la isla Middle, en Australia, y observó
hacia abajo, quedó totalmente enmudecido y alucinado; parecía haber descubierto
un lugar repleto de fantasía, solo imaginable en sueños. Se encontró frente a
sus ojos al lago Hillier; totalmente de color rosa. Cuando llegó a la orilla,
junto a su fiel compañero John Tistle, pudieron observar que el rosado del agua
se mantenía también por fuera, en los alrededores. Después de más de un siglo,
los científicos confirmaron la presencia de los organismos Dunaliella salina y
Halobacteria, que salinizan el agua y podrían ser una de las causas de su color
rosado. También se piensa que puede deberse a las bacterias halófilas rojas
adheridas a las costras de sal. Lo que está claro es que este precioso lago es
totalmente seguro, por lo que bañarse en él es posible y totalmente mágico. 
Un LAGO ROSAAAAAA, que genialidad !!
ResponderEliminarOoOoOoOohhh que bonito
ResponderEliminar